Alimentación saludable frente al coronavirus

La alimentación saludable es vital para reforzar nuestro sistema inmunológico. Consumir alimentos altos en minerales y vitaminas, tiene aún más importancia cuando estamos combatiendo una pandemia como el corona virus que nos azota en la actualidad a nivel mundial. Las personas que no se alimentan bien tienen mayor riegos de que su sistema inmunológico se debilite y, por lo tanto, a contraer enfermedades.

Estas semanas de confinamiento han cambiado los hábitos de alimentación de muchas personas, dejando de lado los productos frescos como la fruta y la verdura y dando importancia a los productos no perecederos para llenar nuestra despensa. Este cambio de hábitos alimentarios, unido al sedentarismo o poca actividad física, debilita nuestro sistema inmunológico.

A continuación, vamos a detallar recomendaciones en nuestra alimentación y nutrición para reducir los efectos del corona virus. Con una buena alimentación, nuestro sistema inmunológico estará preparado para cualquier reto.

Fortalecer el sistema inmunológico

Aumentar el consumo de productos saludables como la fruta y verdura, lo que nos proporcionará grandes cantidades de vitamina A y C. Los antioxidantes presentes en mayor proporción en las frutas de color rojo, son perfectos para combatir las infecciones.

Variar la alimenentación

Es muy importante tener una alimentación saludable y variada. La tendencia en la cuarentena provocada por el corona virus ha sido llenar nuestras despensas de productos no perecederos como los arroces y las pastas. El consumo elevado de estos alimentos, sin una actividad física adecuada, produce un efecto negativo en la función inmune.

Consumo responsable de los alimentos

Es de vital importancia hacer un uso responsable de los alimentos, evitando desperdiciarlos, recordemos que el sector agrícola y ganadero, así como las tiendas de alimentación y supermercados están haciendo un sobre esfuerzo titánico para que no peligre el desabastecimiento en la población.

El consumo responsable será en beneficio de todos, primero a la economía de cada hogar y en segundo lugar, al desabastecimiento de los puntos de venta. Por ejemplo, si hemos cocinado pollo y nos sobra, se puede reciclar para hacer sopa o croquetas, si nos sobran verduras, se pueden hacer cremas, si nos sobra fruta, podemos hacer batidos, en caso de cocinar de más, se puede congelar los alimentos para comerlos en otra ocasión.

Ahora llega el período de la desescalada. Vendrá una etapa en el que retomaremos las dietas para recuperar y combatir todos los excesos de la cuarentena provocados por el corona virus. Recordar que las dietas compuestas de menos de 1200 calorías al día, también tienen un efecto negativo en la función inmune.

Ahora que volvemos a la nueva normalidad en sus diferentes etapas de la desescalada, tendremos que salir a la calle y enfrentarnos al corona virus, tendremos que habituarnos a las nuevas medidas de higiene, para protegernos con los EPIS básicos, como una mascarilla y guantes.

También es muy importante conocer que alimentos fortalecen nuestro sistema inmunológico. Tener un sistema inmunológico fortalecido, no nos garantiza poder o no contagiarnos, pero si nos garantiza un porcentaje elevado de curación en caso de infección.

Los alimentos más beneficiosos para fortalecer el sistema inmunológico frente al corona virus son:

• Almendras: este fruto seco contiene más fibra que cualquier otro similar, además son ricas en proteínas, vitaminas B y C, grasas saludables, hierro, calcio y fósforo. La vitamina E, es esencial para el sistema inmunológico. Consumir 20 almendras (24 gr.) diarias aporta la dosis diaria de vitamina E que necesita el cuerpo humano.

• Ajo: en la antigüedad se usaba para curar infecciones por su propiedad antibacteriana y antiviral, este alimento hace disminuir la presión sanguínea y retarde al endurecimiento de las arterias. El ajo tiene un componente que ayuda a reforzar el sistema inmunológico llamado “alicina” y además posee aminoácidos protinógenos, inulina, potasio, calcio, magnesio, selenio, vitaminas B1, B2, B3, B5 y B6.

• Aves de corral: cuando estamos enfermos, los virus invaden tejidos del tracto respiratorio superior y el cuerpo responde provocando una inflamación. Este, se defiende generando la mucosidad. Por lo general, siempre se toma la sopa de ave de corral, que es un alimento que combate los síntomas del resfriado y previene el mismo. Las aves de corral son una fuente importante de ácidos grasos poliinsaturados como el Omega-3. El consumo de 200 gr. satisface la dosis diaria de Omega-3 que necesita el cuerpo humano en un adulto.

• Brócoli: es la hortaliza con el mayor valor nutritivo conocido, posee varias vitaminas como la A, C, B1, B2, B3 y B6. El tallo del brócoli tiene bastantes propiedades antioxidantes y fibra. El brócoli posee un compuesto químico que estimula el sistema inmunológico. El consumo de 200 gr. de brócoli cubriría las necesidades básicas de vitamina C, ácido fólico y dos terceras partes de la vitamina A. También es una gran fuente de calcio, potasio, hierro, yodo, zinc, cobre y magnesio.

• Chocolate negro: la teobromina es el principal componente del chocolate negro. Protege los glóbulos blancos de los radicales libres y, aunque ayude al sistema inmunológico, no se debe sobrepasar la dosis diaria porque tiene muchas calorías y grasas saturadas. El chocolate negro es antiinflamatorio porque es rico en enzimas y está repleto de vitaminas, también disminuye la presión arterial, mejora la circulación, previene el envejecimiento de la piel y mejora la memoria.

• Cítricos: todos los cítricos estimulan el sistema inmunológico, gracias a sus grandes cantidades de vitamina C. La vitamina C es un micro-nutriente reconocido por su poder ante infecciones agudas, resfriados comunes y con gran efectividad sobre el sistema inmunitario. Los cítricos también contienen vitamina V, B6, zinc, prebióticos y minerales.

• Champiñones: tienen grandes cantidades de vitamina B, riboflavina, niacina y selenio, que es el encargado de aumentar las defensas. También poseen polisacáridos, que son moléculas que aumentan la función inmune.

• Espinacas: tienen grandes cantidades de antioxidantes y beta carotenos que incrementan la capacidad del sistema inmunológico para combatir infecciones, además favorece la división celular que repara el ADN. El poder nutritivo de las espinacas está en las vitaminas y minerales, consumir 100 gr. de este alimento aporta toda la vitamina A, la mitad de la vitamina C, la cuarta parte del magnesio y hierro que necesita el cuerpo humano.

• Kiwi: es una bomba nutricional porque contiene el doble de vitamina C que la naranja, el doble de la vitamina E que el aguacate y una gran cantidad de vitamina A. Tiene la misma cantidad de potasio que la banana, vitamina K, que estimula los glóbulos rojos, además tiene fibra dietética que ayuda a reducir el estreñimiento y el colesterol. Ingerir un kiwi aporta 10% de las necesidades nutricionales de un cuerpo humano y muy bueno para la creación de anticuerpos.

• Pescados grasos: los pescados grasos como el salmón y el atún, son ricos en ácidos grasos Omega-3 que ayudan a combatir la artritis reumatoide y refuerza el sistema inmunológico. Consumir pescado azul como bonito, caballa, jurel y anchoveta es fundamental para prevenir enfermedades. Los pescados protegen al cuerpo de bacterias, virus y hongos produciendo anticuerpos que los bloquean y los expulsan, su aceite natural influye de manera positiva en el sistema inmune.

• Sandía: rica en vitamina A y C que son pontencializadores en la función inmune, tiene una gran capacidad antioxidante y está compuesta por bioactivos que contribuyen a la salud. Su consumo se vincula con la reducción de inflamaciones y padecimientos de enfermedades.

• Té verde: esta bebida caliente, tiene compuestos beneficiosos que potencian de manera extraordinaria la capacidad de aumentar el número de células T reguladoras para el sistema inmune y suprime enfermedades. Su contenido alto en flovonoides lo hace extraordinario para la función inmunológica. También es buena fuente de L-teanina, que contribuye a la producción de componentes de glóbulos blancos que combaten a los gérmenes. Es un excelente quemador de grasas que tiene como nota negativa el contenido de cafeína.

Después de semanas de inactividad o poco ejercicio físico debido al confinamiento producido por la pandemia del corona virus, se recomienda a todos los que inician de nuevo su actividad física ya sea profesional o de ocio, comenzar a realizar la actividad física progresivamente para evitar lesiones.

El fenómeno running vuelve a nuestras calles, quizás ahora con más auge que nunca. Esta nueva normalidad nos hace valorar, con más ahínco, la simple libertad de poder hacer deporte en la calle. No olviden tomar las precauciones de distanciamiento e higiene recomendadas y llevar una alimentación saludable. Nuestro sentido común nos dará la victoria.